Por Pablo Vázquez Politólogo; Docente de la UCES; Miembro de Número de los Institutos Nacionales Eva Perón y Juan Manuel de Rosas
Militar y docente, conductor y político, ante todo fue el intérprete de un sentido histórico nacional. En una época de corrupción política y sometimiento al Imperio Británico, canalizó entre 1945 a 1955 las esperanzas de aquellos que buscaron el despegue industrial, la integración social y la dignificación de los trabajadores. Y ellos encontraron en Perón su referencia política y pertenencia cultural.
Derrocado en 1955, su retorno por el poder popular en 1972 – 1973 significó un hito liberación que aún motiva. En sus memorias de reciente publicación, Antonio Cafiero reflexionó: “Perón tuvo que enfrentar la falta de comprensión de su propuesta de unidad nacional y de revolución pacífica. Desde distintos sectores, aparentemente opuestos, las acciones terrorista pretendían socavar al gobierno constitucional y popular… el 1º de julio de 1974, Perón nos dejaría para siempre”.
Dos meses antes de su muerte Perón anunció el Modelo Argentino.
La base fue recuperar al hombre y sus valores, donde la Argentina es el hogar.
A las tres banderas justicialistas: Soberanía Política, Independencia Económica y Justicia Social, anexándole la de Cultura Nacional. La síntesis de las mismas, expresada en la Tercera Posición – potenciada esos años con el Tercer Mundo – se complementó con la evolución a través del Continentalismo y Universalismo.
Incorporó la cuestión ecológica y racionalización de recursos naturales como política de Estado. Se contempló el papel de los medios de comunicación y se potenció el aspecto científico – tecnológico, interactuando con lo económico, lo político y lo social. A su vez se remarcó el rol de la mujer y la juventud en este Modelo Argentino.
Planteó formas más amplias de institucionalización, a través de la Democracia Social y la participación de las instituciones intermedias en el marco de la Comunidad Organizada. En la misma gobierno, partidos políticos, intelectuales, empresarios, Iglesia, Fuerzas Armadas y trabajadores.
El contenido del mismo mostró cabalmente la dimensión de estadista y adelantado a su tiempo, a vez que, dolorosamente, enseñó que el haber descontinuado su obra tuvo consecuencias irreparables.
Perón: figura política del siglo XX, epónimo de una época y catalizador de anhelos de millones de argentinos.
A pesar de tensiones políticas actuales, las ideas de Perón se proyectan en sentir del pueblo peronista, quien mantiene vivo su legado.